“Nos inspiran nuestras propias experiencias así como las de otras personas. El año pasado fue el inicio de una nueva era para todos, nos dejó mucho por analizar y la necesidad de repensar nuestras prioridades. Ha habido tantos cambios en este planeta: el confinamiento, la constante mirada al pasado, la lucha de muchos contra la infinita injusticia, el amor… todo esto hace que nuestras nuevas canciones tengan temas muy actuales pero que también trasciendan al tiempo, continuando el sonido característico de Acid Coco, con la innegable influencia del Caribe.” – ACID COCO
Si definimos folclore como la transmisión de tradiciones de un grupo particular de personas, no se puede negar que Acid Coco, conscientemente o no, está jugando un papel importante en la difusión de la cultura popular de la costa caribeña de Colombia. En su música encontramos vínculos con la tradición: la gaita, flauta típica de la cumbia rural, los licks de guitarra efervescentes que son una parte tan importante de los sonidos afrodiaspóricos de la costa, un bajo que hace rechinar los dientes, indicativo de las comunidades criadas en los sistemas de sonido picó durante los 70, el sonido inconfundible del xilófono de madera de la marimba (cada nota cae como una gota de lluvia sobre el dosel de la selva), y luego se suman sus letras.
La tradición, no obstante, no es algo que debe permanecer inmóvil; en las palabras de Andrea, por ejemplo, podemos descubrir la tradición oral de los últimos 30 años: en “Hoy Como Siempre” canta sobre la necesidad de que las mujeres se defiendan, de no enamorarse tan fácilmente; en “Cara Dura” el sentimiento es especialmente fuerte, en la letra de este tema dejan en evidencia a un depredador que se encuentra en la pista de baile y que no será tolerado; así mismo, en “Mundo de Mentira” la vulnerabilidad aflora en la historia de una mujer cuya vida se ha convertido en un “mundo de mentiras” desde que su amante se fue. ¿A quién le podrá creer ahora que la persona en la que más confiaba se ha ido?
Son historias que podrían haber salido de las salsatecas de Cali, los picós de Cartagena o cualquier club del mundo, pero a través de la audaz producción de Paulo no queda duda de dónde estamos. Dembow, cumbia, reggaeton, incluso en el punzante folk caribeño “Por Las Venas” o la melodía chiptune de “Aquí y Allá”, no hay otro lugar donde podamos estar que no sea la costa caribeña de Colombia. Es música de experiencias vividas, de crecer en los clubes de Colombia ya sea a través de su violencia como de sus realidades cotidianas. La cultura se transmite.
Acid Coco es un dúo colombiano por cuyas venas corre el pacificó, el caribe, los andes, la selva y mas… Está conformado por los hermanos OlarteToro, Paulo y Andrea. Paulo Olarte es conocido en el ámbito de la música electrónica desde hace muchos años, cuenta con trabajos para distintos sellos discográficos como Dynamic Music (Alemania), Goldmin Music (Francia), Galaktika Records (España), y muchos otros. Entre sus últimos trabajos se encuentran distintas colaboraciones con otros compatriotas expatriados y aventureros musicales y también como solista, El Dragón Criollo, Jaguar, Contento presentaciones junto a Los Trasatlánticos y regente de compilaciones como Color de Trópico (Vol.1 y 2) junto a El Palmas DJ. Andrea, por su parte, canta desde muy temprana edad. Después de haber integrado la banda colombiana de reggae DonKey Records cantando y grabando en conjunto, en 2006 se embarca a nuevos rumbos: Miami, luego Berlín, ciudades que han sido itinerarios de su viaje en el que ha prevalecido el canto en bandas de world fusion como Hinsetzen Pause. También ha participó en giras con Los Trasatlánticos.