León Benavente. La naturaleza de reinventarse. [Entrevista]

Diez años de un viaje lleno historias entre grandes canciones y shows energéticos, son los que ha recorrido León Benavente. Una de las bandas favoritas del indie rock español retoma su tradición de visitar México por lo menos una vez al año, con fechas en distintas ciudades, no podía faltar la parada obligada en CDMX con un show muy especial en esta edición del Festival Marvin. 

“Somos como hermanos, es lo bonito de este grupo”, nos dice Luis Rodríguez, amante del picante y ¼ de León Benavente detrás de la guitarra. Junto a Abraham Boba (voz), Eduardo Baos (bajo) y César Verdú (batería), formaron un supergrupo con la amplia experiencia musical de cada uno, aunque la visión del proyecto surgió cuando el cuarteto formaba parte de la banda de Nacho Vegas. Una pasión compartida los ha llevado a ser tan queridos por el público en cada trayecto, el amor por lo que hacen es su guía y la reinvención, una pieza clave de su genialidad. “El trabajo son las horas de avión, las horas de carretera. Lo otro es una maravilla. Salir a tocar, ver la cara de la gente, ver a mis compañeros. No hay dinero que lo pague, es increíble”. 

León Benavente se distingue por su reinvención. Nunca han tenido miedo de explorar territorios sonoros diferentes y experimentar. Sus historias se convierten en canciones inspiradas en el presente y con reflexiones que golpean por su realidad. Como si de un nuevo ciclo se tratase, este año han sorprendido con un cuarto disco, Era. 

Era, se mueve entre los finales y los nuevos comienzos, entre situaciones que reflexionan instantes claves que han moldeado nuestro presente y todo aquello a lo que se ha pasado página y ya no es. León Benavente no son enemigos de la nostalgia, pero nos demuestran que hay que saber para qué sirve y cuándo dejar ir. Una vez más, vuelven a hacer polvo la etiqueta del rock en su música, con sonidos nuevos para el cuarteto que han conseguido al salir de su zona de confort en la producción, cambiando los roles de sus instrumentos. Con este nuevo material regresan a México con los que prometen ser shows enérgicos y espectaculares en Puebla, Guadalajara y Ciudad de México.  

Finalmente veremos su regreso a México para el Festival Marvin ¿Cómo se sienten de regresar? ¿Qué podemos esperar de este show? 

Estamos muy ansiosos, tenemos muchas ganas. Desgraciadamente, la pandemia interrumpió una costumbre que llevamos haciendo casi 12 años, que es visitar el país una vez al año como mínimo. Ahora tenemos muchísimas ganas de volver. Lo hablábamos siempre. No es un tópico, lo decimos porque lo sentimos. Nos gusta mucho lo que conocemos del país, que no es mucho, pero tampoco es poco. Y nos apetece muchísimo volver a sentir esa vibración, esa forma que tenéis vosotros de sentir la música. 

¿Cómo describirías su relación con México? 

Creo que la primera vez que los cuatro tuvimos relación con México, fue a raíz de cuando trabajábamos con Nacho Vegas. Éramos su banda y parte del equipo técnico, la primera vez que yo fui a México fue de su mano, conocimos Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey. Con el tiempo, cuando comenzamos el proyecto de León Benavente, pues también aprovechamos cuando iba Nacho y nos quedábamos, así pudimos conocer otro tipo de ciudades no tan grandes.

Yo creo que los cuatro tenemos una relación muy bonita y muy estrecha porque en la parte personal, tenemos muchos grandes amigos por allá, tenemos grandes recuerdos musicales, yo tengo grabado a fuego la primera vez que toqué en el Metropólitan, tenía la sensación de haber tocado el cielo.  Nos encanta la gente, la comida, nos encanta lo que decía, esa manera que tenéis de vivir la música y eso a la vez nos vuelve a nosotros. Es algo muy bonito. 

Tras la pandemia, regresan a los escenarios con un álbum que habla del pasado y un nuevo inicio ¿Crees que estos últimos años hayan influído en las letras que escribieron? 

En la parte de las letras, el que de verdad tendría que contestar sería Abraham. Pero bueno, medio hablé con él, que es mi amigo [ríe]… E inevitablemente a todos nos afectó de alguna forma u otra. Pero no creo que Era, sea un disco hijo de la pandemia. Creo que vamos a necesitar, y cuando digo vamos, me refiero al mundo, vamos a necesitar un poco más de tiempo para saber el grado de influencia que tuvo la pandemia. El lío yo creo que va a venir después. Volviendo al álbum, defendemos que no es un álbum sobre la pandemia, ni es un álbum post pandémico en el sentido de que hace referencias, hombre, inevitablemente está hecho por nosotros, y nosotros sí nos hemos visto influidos por el que se corta todo. Era un momento con toda la inercia cogida y de repente ‘pum’, metidos en casa. 

Además de las letras, algo muy interesante y le añade a su característica reinvención, es que durante su proceso, decidieron cambiar de roles, cambiar de instrumentos y salir de la zona de confort. ¿Cómo funcionó eso para ustedes y qué significado personal pudo tener? 

Una característica del grupo es lo que tú bien apuntabas, la reinvención. Es muy grato cuando la gente se da cuenta. Nosotros intentamos siempre no repetirnos, no repetir fórmulas, no repetir el mismo tipo de canción por varios motivos. En primer lugar, por nosotros mismos, porque nos parecería muy aburrido y muy poco emocionante. Y luego nosotros somos de la opinión que nos gustan, los artistas que nos sorprenden como público. Entonces, a nosotros también nos gustaría que nuestro público se sintiese sorprendido.

Qué pasta, que esto es muy tentador. Es decir, con el disco anterior me fue bien y tengo esto que funciona, lo repito. Nosotros no podemos hacer eso por eso, porque no sería honesto por nuestra parte y porque sería muy aburrido, muy aburrido. Y entonces eso pasa por hacer, por ejemplo, formatos de canciones distintos, la inclusión de sintetizadores en un grado mayor que en discos anteriores. Hay momentos en que en lugar de una batería acústica hay cajas de ritmos. Yo soy bajista de siempre, pero en León Benavente era guitarrista. Dejo un poco la guitarra, recupero el bajo… La cosa es, hacerlo un poco mal al principio y ubicarte para que luego salgan cosas distintas, porque si no es una forma de quedarte anclado en algo que no creo que nos beneficie ni a nosotros ni a nuestra música.

No sería natural quedarse en el mismo sitio si en tu vida creces y cambias, debería ser lo mismo con tu arte…

Hay gente que es muy feliz con la rutina y haciendo lo mismo. Yo a veces me escucho discos de ACDC y son geniales, pero me suenan igual. Pero es que a mi me gusta mucho, así también, como los Ramones, y hablamos de decisiones bastante personales. A nosotros sí que nos gusta movernos y sentirnos vivos porque ya no somos jóvenes, pero no somos viejos, entonces nos gusta sentir que la música nos haga burbujas ahí dentro.

La música principalmente siempre va a ser para ustedes, ya después naturalmente, se proyecta hacia los demás. 

Yo creo que sí, creo que es la forma honrada de hacerlo. No quiero que parezca un ejercicio de egoísmo ni de egolatría. Pero es que yo sé exactamente, o el grupo sabe perfectamente lo que queremos hacer. Cuando hacemos música creo que hacemos la música que a nosotros nos gustaría escuchar como público. Entonces tratamos de hacer algo que nos apasione, que nos ilusione y hacer el mismo disco siempre, probablemente a nosotros no nos sentaría bien.

Dices que te gusta que te sorprendan los artistas, y hablando de reinvenciones ¿Cómo ves el posible futuro de León Benavente? 

Pasa una cosa extraña, es que cuando estás dentro del proceso es muy difícil salir fuera y tener cierta perspectiva para entender dónde estás. El año que viene vamos a hacer diez años de banda y me pasó súper rápido. Cuando estás dentro, no parece. Entonces ahora mismo no sé en qué punto estamos a nivel evolutivo. Sé que estamos cogiendo algo que nos gusta. Hasta ahí puedo leer, porque tampoco te podría decir que estamos entrando más en contacto con la electrónica, no tengo ni idea.

Sé en qué punto estamos a nivel de los shows en directos y cada vez son mejores. Yo cada vez me bajo del escenario con una sensación de haber hecho un viaje increíble. Y yo creo que ya desde el principio este grupo se caracteriza un poco por eso, por los conciertos enérgicos, participativos, que a la gente le de emoción y yo creo que esa línea si nos gustaría mantenerla. ¿Dónde acabaremos? No tengo ni idea. Quién sabe. A lo mejor el siguiente disco de León Benavente es con un mariachi. No lo sé.

Se ve que sus shows en vivo son una gran experiencia para el público. ¿Cómo aplican esa reinvención también en el escenario? Tanto para no repetirse, como para ustedes mismos sentirse vivos en cada show. 

Hay una cosa en la que se trabajó mucho que fue y que yo creo que ganó ciertos enteros, fue la escenografía. La pena es que en los viajes a México, logísticamente, o tienes mucho dinero para llevártelo todo, no se puede traer. Incluso en España hay sitios donde es un poco difícil porque el camión no entra en ninguna calle. Pero fue una cosa en la que trabajamos mucho, muchísimo y en la que se invirtió dinero, tiempo y yo creo que fue un paso hacia adelante, hacia algún sitio.

Nosotros somos cuatro personas tocando, pero esa escenografía, yo estoy muy orgulloso de ella porque hacía que los shows estén en otro nivel. Y hay una anécdota muy curiosa, que yo estoy de espaldas y yo no lo veo porque estoy viendo al público. Entonces cuando veo los vídeos en Instagram me digo ‘pero madre mía lo que tenemos detrás’. 

Por las razones que comentas, esa escenografía no viene esta vez a México ¿Cómo adaptan el show para que esté presente de alguna forma este elemento? 

Lo que sí tenemos claro es que no todos los lugares tienen las mismas condiciones, la infraestructura que llevamos, hay sitios donde literalmente no cabe o no hay espacio. Entonces, lo que sí tenemos es, digamos, como no un plan B, pero tenemos un equipo técnico que son muy buena gente, muy buenos profesionales y cuando a lo mejor no podemos llevar todo el show, tenemos una especie de adaptación que hace el técnico. Igualmente, conectada con lo que estamos haciendo en el escenario y va a ser increíble. Con esto quiero decir que te animes y nos vayas a ver al Marvin.

Además de una clave esencial que es salir de tu zona de confort y seguir viviendo. ¿Qué más crees que se pueda hacer o hacer para reinventarte, para poder experimentar, para sacar más inspiración y seguir adelante?

Si fuese tan sencillo, no nos habría tomado tanto tiempo. Pero bueno, yo creo que los cuatro a veces no sabemos qué hacer, pero sí sabemos lo que no hay que hacer. Y ya es un camino para empezar a buscar. No sabemos hacia dónde vamos, pero sabemos dónde no queremos estar. Y entonces eso hace que a veces te equivoques, porque claro, esto no es infalible, pero no sé por dónde este viaje increíble que es León Benavente para nosotros, como cuatro jóvenes que comenzaron esta andadura hace diez años y que nos ha cambiado la vida por completo.

Era tiene canciones de todo, no siguen la misma línea temática, pero si pudieras poner una sinopsis a esta historia ¿De qué te imaginas que trataría? 

Es muy difícil porque precisamente en las entrevistas estamos negando que sea un disco conceptual. No lo sé. El título creo que es un buen indicador de por dónde queríamos que fuese. “Era” tiene dos acepciones desde nuestro punto de vista. La acepción como verbo, el pasado de algo que fue, “era”, “fue”, de algo que ya no es que lo importante es lo que será y no lo que era. Volvemos a lo del caminar hacia adelante. Y luego tiene otra acepción que es el sustantivo, el nombre, una era es un periodo de tiempo concreto más notable. Por lo que sea, a veces por desgracias, otras veces por cosas felices.

Entonces hay un poco de eso. Tiene que ver con el paso del tiempo, con lo que viene por delante, con no mirar demasiado atrás. Pero a mí sinceramente, me costaría mucho poner una sinopsis sintética, de lo que queremos decir. Pero lo mejor es que perdona lo mejor. Creo que cada uno lo escuche y saque sus propias conclusiones. 

Diez años como León Benavente y a pesar de las reinvenciones. Cuando volteas atrás desde que se conocieron y pensaban en formar este grupo ¿Qué crees que sea algo que no cambiará nunca en su música?

Yo creo que mirando atrás y haciendo un análisis del origen dentro de este viaje en movimiento constante, hay algo que se mantiene y creo que es una especie de sintonía en la que estamos los cuatro, es fundamental para poder trabajar, y más en la creación. Y las ganas de pasárnoslo bien haciendo música. Parece una frase muy manida, pero el día que eso se nos acabe, yo creo que se va todo a la mierda.

Y creo que tenemos algo ahí, imagínate la cantidad de veces que habremos tocado pues somos un grupo que toca muchísimas veces. Y a mí el otro día un amigo en un festival acá en España, no me acuerdo dónde era, me decía “¿pero tú no te aburres de tocar siempre lo mismo?”, yo les decía es que cada día es distinto. La sensación, porque cambia el sitio, cambia la gente… Hay canciones que llevo tocando nueve años y siguen pareciéndome algo emocionante. Y yo, el día que eso cambie, mal estamos. Entonces yo creo que esa línea de convertirnos un poco en salvajes en el escenario, eso es lo que nos mantiene a flote.

El de León Benavente es un show que no puedes perderte en Festival Marvin este 29 de octubre en el Escenario Rompe del Parque España. Compra tus boletos AQUÍ.

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