Courtney Marie Andrews está lista para un nuevo capítulo musical. Tras el éxito de Old Flower, álbum por el cual fue nominada por primera vez al Grammy, la cantante estadounidense se desvía un poco del característico sonido americana, y se adentra en nuevos territorios sonoros. “Satellite” y “Loose Future” son una fuerte demostración de ello, y los primeros vistazos de su próximo material discográfico, Loose Future.
Si bien, Old Flower se componía de relatos y memorias de una dolorosa ruptura, Loose Future explora una nueva faceta, una especie de renacimiento artístico iniciado desde la introspección. “Es un álbum que nació en una época en la que llegué a un acuerdo con mi amor propio, dejando así entrar el amor desde el exterior. Se trata de permitir que ese amor suceda, pero también de saber que simplemente no podemos controlar o predecir nada a nuestro alrededor, pero si tenemos amores estables, podemos superar todo. También se trató de darme cuenta de mis defectos y patrones pasados, aquellos que rompemos o que revivimos una y otra vez.”
Visto desde nuevas perspectivas, el amor sigue siendo el centro de Courtney Marie Andrews en Loose Future, una fuente insaciable de inspiración que para ella, es la contraparte de otro gran sentimiento, la soledad. “Creo que todos en este mundo nos sentimos solos y en algún momento experimentamos ese extravío, esa sensación de no pertenecer. Todos nacemos y morimos solos, es por eso que tenemos esa constante búsqueda… Es el sentimiento más universal, buscar el amor y la pertenencia. Y el amor también es un excelente reflejo de nosotros mismos, nos ayuda a crecer y a entendernos mejor”.
Ese amor propio que todos tanto buscamos, es fundamental en la narración del video del sencillo “Loose Future”, en donde encontramos a la cantante frente a un espejo siendo transformada por varias manos, “quería representar a una persona con todos estos estereotipos e impresiones que se nos imponen, cosas que a veces nos hacen sentir incómodos y que nos encasillan”, entre los constantes cambios de looks, hay algo que no podemos ignorar, y es la fuerte expresión en su mirada. “Los ojos demuestran que estoy lista para encarnar todo lo que soy, una multitud de cosas”, comenta Andrews.
No es coincidencia que esta canción sea la que le da el título al álbum. Entre la búsqueda y lo inesperados que son el amor y la vida, el futuro incierto es un concepto importante para reflexionar en el presente.
“Nuestros futuros son muy impredecibles. Como alguien que ha experimentado mucho, ha amado mucho y se ha roto el corazón en esta vida, que se ha caído y ha fluido, esa única cosa que permanece constante es tu elección, aquello que decides hacer. El concepto de Loose Future viene de apegarte a tu propio compás en ese futuro incierto”.
Aunque “los sentimientos plasmados no están directamente relacionados con la pandemia”, la inseguridad del pasado detonó la conversación del futuro que surgió durante este tiempo, por lo que es inevitable que lleve una marca del mismo. Tras hacer las paces con el hecho de no saber cuándo volvería a un escenario, encontró la parte positiva de la situación, conectando con la música sin pensar en el escenario desde la preparatoria, “una oportunidad para adentrarme por completo y aprovechar mi musa, un tiempo en donde pude dedicarme a crear sin pensar en la relación que esto tendría con el resto del mundo”. Fue así como escribió diariamente alrededor de 60 días, algunos componía una canción completa, otros días la mitad, otros días hasta tres canciones, sumiéndose en ese estado casi meditativo que le da la música.
“La música me ofrece un lugar espiritual al que ir para reflexionar sobre conversaciones y cosas que se han dicho. De alguna manera es como escuchar tus propios pensamientos de vuelta. Algunas personas tienen terapeutas que les reflejan sus propios pensamientos, la música hace eso por mí, revela partes de nosotros con las que tal vez no estábamos en contacto. Es un gran reflejo de lo que nos pasa internamente. Si me siento atraída por una canción, normalmente es porque estoy pasando por algo similar a lo que relata.”
Sin haber sido premeditado y buscando ‘los sonidos del verano’, este álbum explora una versión sonora que no le conocíamos, sorprendiéndonos como lo hacen y emocionan aquellos músicos que logran hacer un cambio radical. “Quería que este álbum fuera más progresivo y más optimista que los pasados. Tiendo a hacer muchas baladas, algo que se me da muy natural, pero esta vez tenía el deseo de hacer un disco veraniego por primera vez, sabía que quería muchas armonías, quería sensaciones. Me encanta el sonido de los instrumentos naturales, jugar con sonidos modernos y clásicos y mientras grababa, me fascinaba descubrir esta dicotomía entre lo nuevo y lo viejo, lo progresivo y lo clásico”.
Para lograrlo, contó con la colaboración de Chris Bear (Grizzly Bear) en la batería, y de Josh Kaufman (Bonnie Light Horseman) en varios instrumentos, pero el mayor colaborador fue Sam Evian, co productor del álbum. Encontrando una armonía creativa que fluía naturalmente, Courtney Marie Andrews vivió durante el verano en casa de Sam y su pareja, Hannah. Sin ninguna prisa y entre grandes pláticas de música, grabaron en el estudio de Sam, Flying Cloud Recordings. “Me encantó la habilidad de Sam de encontrar sonidos y su sensibilidad rítmica y para tocar el bajo. Es un gran músico. Además toca muchos instrumentos de manera increíble, y es una persona tan reflexiva, tuvimos grandes conversaciones, compartimos montones de ideas. Es genial trabajar con alguien con tanto entusiasmo”.
Con el lanzamiento del álbum a la vuelta de la esquina y un sonido que tal vez confunda a sus fieles seguidores, Courtney confiesa que ha dejado de leer comentarios en línea que la puedan hacer sentir como “basura”, al final “si trataras de hacer discos para complacer a un cierto grupo, no sería nada auténtico”. Autenticidad, algo que también llevará a los escenarios cuando presente estas canciones en vivo. “Mi nuevo enfoque es permitirme descubrir, ser más flexible en mis presentaciones para descubrir algo nuevo de cada canción. Antes pensaba que debía tocar cada canción exactamente igual cada vez, ahora me permito tener esa apertura en vivo para conectar con mi música de diferentes formas. Al final, si estoy sintiendo algo auténtico en el escenario, la audiencia lo sentirá también.”
Por lo pronto, Courtney Marie Andrews solo espera que, con suerte, este álbum pueda “hacer feliz a algunos y hacerlos pensar en nuevas cosas”.
Loose Future saldrá el 7 de octubre a través de Fat Possum.